La protección de la propiedad intelectual, otorgando el derecho exclusivo a alguien de usar, vender o fabricar una invención por un cierto período de tiempo. Una patente es un término que se ha utilizado durante muchos siglos, y se aplica tanto a los inventos físicos como a la propiedad intelectual.
Una patente no da el derecho de producir y vender un producto; más bien da derecho a prohibir que otros produzcan un artículo o una pieza de tu propiedad intelectual para su propio beneficio monetario. El lapso de tiempo para una patente varía, pero generalmente es de veinte años desde el momento de la invención del artículo o propiedad.
Las patentes son otorgadas por los gobiernos a los inventores como una forma de evitar que otros usen, fabriquen o vendan la invención por un período de tiempo determinado. Es una forma de proteger los derechos intelectuales y las propiedades de los inventores, y garantizar que los demás no sean compensados por su trabajo y esfuerzos.
Una vez que se otorga una patente para una invención, esta pasa a ser propiedad exclusiva del inventor y, como cualquier otra forma de propiedad, puede arrendarse, alquilarse e incluso venderse directamente. Las patentes son de naturaleza territorial, por lo que las patentes del Reino Unido solo otorgan derechos a sus titulares en el Reino Unido, mientras que las patentes de los EE. UU. otorgan derechos a sus titulares en los EE. UU. La legislación sobre patentes puede diferir de una jurisdicción a otra. La siguiente información sobre patentes es aplicable a la legislación del Reino Unido:
Para asegurar una patente, su invención debe:
- Ser algo completamente nuevo que nunca se haya puesto a disposición del público en ninguna parte del mundo antes de la fecha de solicitud de la patente.
- Incluya algo novedoso y único que no sea obvio para alguien con un conocimiento profundo del campo en el que se crea la invención.
- Tener alguna aplicación para la industria. Debe poder usarse de alguna forma en una industria, ya sea que signifique que es un dispositivo completo, un material nuevo o un proceso que mejora algún método operativo industrial.
Una invención no puede recibir una patente si es:
- Una teoría científica o método matemático;
- Un programa de computadora o un método para presentar información;
- Una creación artística como una obra literaria, drama o arte visual;
- Un descubrimiento de algunos fenómenos naturales;
- Un plan para hacer negocios, jugar un juego o realizar algún otro acto mental.
Además de los factores determinantes anteriores, tampoco es posible recibir una patente para un nuevo procedimiento médico, terapia o método de diagnóstico, ni es posible patentar un nuevo tipo de planta.
Los derechos de los inventores bajo Patentes
Una patente es un medio legal para evitar que otros usen tus inventos. O le permite licenciar el invento para que lo usen otros. Debido a que es una construcción legal, también permite acciones legales contra aquellos que podrían usar la invención sin su permiso, incluso reclamar daños y perjuicios. Se debe obtener una patente antes de poner en funcionamiento la invención, una vez que es parte del dominio público, no es posible patentarla. Quizás lo más importante es que la Oficina de Propiedad Intelectual no proporciona ningún seguro contra otros que usen su invención, es responsabilidad del inventor o de los propietarios asegurarse de que no se infrinja la invención patentada.